La búsqueda será este sábado y está liderada por un ingeniero y un grupo de estudiantes universitarios que irán hasta el buque Monte Cervantes, cuyos restos se encuentran a 40 metros de profundidad. La idea es visibilizar el patrimonio histórico y cultural de la zona.
La expedición liderada por un ingeniero y un grupo de estudiantes universitarios que buscará llegar con buzos y robots hasta los restos del buque de pasajeros Monte Cervantes, hundido desde 1930 en el Canal Beagle, frente a las costas de la ciudad de Ushuaia, se concretará el próximo sábado de no mediar contratiempos técnicos o climáticos.
El grupo de expertos buscará descender hasta donde se encuentra una parte del barco bautizado como el “Titanic argentino”, en una travesía que no tiene fines económicos, sino que persigue la exploración y documentación del patrimonio cultural de la zona.
El objetivo principal de la inmersión en las aguas heladas del Beagle es encontrar y filmar la “lámpara de navegación”, un artefacto “del tamaño de una heladera” que se utilizaba para que el barco pudiera ser divisado por otras naves en alta mar, aunque también se explorarán más restos del naufragio, según explicó Carlos Pane, el líder de la misión.
Pane es un ingeniero electrónico graduado en la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) que luego de una trayectoria en empresas privadas se convirtió en investigador y docente de la Universidad Nacional de Tierra del Fuego (Untdf). (TELAM)